¡Comics! ¡Cine! ¡Rock! ¡Novela negra! ¡Series de televisión! ¡Lo que me salga de las narices!

miércoles, junio 04, 2008

40 años de profesión de Richard Corben

Celebramos los 40 años de profesional de Richard Corben esta semana en diversos blogs, coordinados por el amigo Jeremy Brood. Esta es mi humilde aportación...
No recuerdo qué fue lo primero que vi de Richard Corben pero sí lo primero que me impactó de verdad. La portada del segundo tomo de El extraordinario mundo de Richard Corben, un tomo que se había montado Toutain recopilando diversas historias de la Warren, a diferencia del primero que recogía material underground y que tenía una versión americana.
Esa imagen del hombre atacado por tiburones me pareció sensacional. Había sido realizada para la portada del Creepy #101, un número que reeditaba In Deep (Profundo, en España), una magistral historia corta con guión de Bruce Jones. Ese número americano llevaba una secuela, In deep 2, con guión de Jones pero, ay, dibujos de Leo Durañona. El original de la portada, por si a alguien le interesa, estaba en el museo del cómic que montó Kevin Eastman pero dado que cuando tuvo problemas económicos vendió un montón de cosas (incluídas algunas que le habian regalado para el museo) cualquiera sabe por dónde para...
Si Corben ocupó un lugar preferente en los autores a seguir de finales de los setanta y buena parte de los ochenta fue por su uso del color. En unos años en que el color era funcional, plano y con una gama muy limitada, Corben nos enseñó lo que se podía conseguir y abrió camino a muchos otros.
Pero Corben, si uno se paraba a estudiarlo, tenía una narrativa asombrosa, y un dibujo con una fuerza que traspasaba la viñeta. Es cierto que a veces se le iba un poco la mano y la cosa quedaba un poco guarra, sin un gran acabado, pero el resultado global siempre era apasionante.
En ninguna tebeoteca deben faltar obras como el primer Den, una fantasía donde Robert E.Howard, Lovecraft y el John Carter de Burroughs, tres grandes amores de Corben, se mezclan de una forma totalmente personal; o Bloodstar, en blanco y negro preferiblemente, una versión libre de un relato de Howard llena de emoción; o Mundo Mutante, uno de los mejores relatos postapocalípticos hechos jamás...
Corben tuvo un momento de esplendor. Luego, la crisis de las revistas y concretamente de Toutain en España y Fantagor en los EEUU, y los nuevos aires que se respiraban (eran los años en que Jim Lee y compañía empezaban a ser los reyes del mambo) apartaron del público al autor de Kansas que desapareció durante varios años. A ello seguro que contribuyó su actitud casi de ermitaño. Es conocido que Corben apenas contacta con sus editores, que no suele viajar y que no está interesado en reeditar sus antiguas obras porque los materiales están en mal estado y no quiere perder tiempo arreglándolos. Lo sé, lo he intentado...
Pero de repente, volvió porque algunos editores y guionistas aún lo recordaban. Y ahora lo tenemos en DC, en Marvel, en Dark Horse, con Hellboy, con Hellblazer, con Hulk y Punisher, con Swamp Thing y el Motorista Fantasma, pero también adaptando a Poe y Lovecraft, trabajos que nos recuerdan sus relatos en la Warren. Y me alegro por ello, pero no puedo evitar pensar que me gustaría poder volver aventuras de Den, qué queréis que os diga...